Oviedo se llena de profesores y vacía de respuestas: la Consejera Espina agrava el conflicto educativo
El hartazgo del profesorado asturiano se ha hecho visible —y audible— este lunes en las calles de Oviedo. La huelga convocada por los sindicatos ha tenido un seguimiento muy significativo en centros de toda la región, culminando en una manifestación multitudinaria que volvió a evidenciar el malestar creciente en la comunidad educativa.
Los docentes exigen algo tan básico como diálogo real, mejoras en las condiciones laborales y respeto por su labor. Pero la respuesta de la Consejería, encabezada por Lydia Espina, ha sido la opuesta: silencios prolongados, declaraciones altivas y un enfoque inmovilista que ha intensificado el conflicto en lugar de buscar soluciones.
Lejos de asumir responsabilidad, la Consejera ha preferido cargar contra el profesorado, evitando compromisos concretos y escudándose en promesas vagas que ya no convencen a nadie. Los sindicatos coinciden en que Espina ha gestionado el conflicto “de espaldas al aula”, más preocupada por la imagen que por la realidad.
La manifestación de hoy no ha sido un episodio aislado, sino la expresión de una comunidad educativa cansada de sentirse ignorada y desbordada. El profesorado no solo reclama mejoras laborales: exige que se le escuche y que se valore su papel como pilar del sistema público.
Con este escenario, el calendario de movilizaciones podría ampliarse. Y mientras tanto, la Consejera sigue sin mover ficha, alimentando con su pasividad una crisis que podría haberse evitado con voluntad política y capacidad de escucha.
Alta participación en la huelga docente en Asturias mientras crece el malestar contra la consejera de educación Lydia Espina
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