Vuelven las carabelas portuguesas a la playa de Salinas. Se han localizado varias en el arenal castrillonense. Según fuentes del servicio de Salvamento, los ejemplares que llegaron a la orilla y no causaron ningún problema a los pocos bañistas que estaban en la playa. El aumento de la temperatura del agua y el viento de Galicia favorecen las llegada de estos pólipos
La carabela portuguesa no son medusas, son organismos formados por tres pólipos con numerosos tentáculos que le sirven para atrapar a sus presas y que pueden paralizar a un pez grande y afectar seriamente a la salud de los humanos. La falta de sus depredadores naturales puede haber contribuido a su aparición en nuestras costas.
La carabela portuguesa es conocida también como botella azul o falsa medusa, que también puede provocarnos un fuerte dolor.
Su nombre viene de que su parte flotante “se asemeja a una bolsa azul transparente rellena de gas de unos 30 centímetros rematada por una vela de color violáceo en la parte dorsal, que le sirve para desplazarse. La parte sumergida está formada por una serie de tentáculos que pueden alcanzar los 10-20 metros”, explican desde el Ministerio de Sanidad.
Al igual que otros tipos de medusas, esos tentáculos expulsan una sustancia tóxica al entrar en contacto con ellos que provocan las siguientes molestias:
En el caso de picadura se recomienda ir directamente a un puesto de socorro para ser atendido, aplicar una solución tópica de bicarbonato de sodio, si la persona experimenta síntomas de empeoramiento se debe acudir a urgencias.